Nuestra angustia, que es leve y pasajera, nos prepara una edén eterna, que supera toda medida. Porque no tenemos puesta la mirada en las cosas visibles, sino en las invisibles: lo que se ve es transitorio, lo que no se ve es imperecedero. El sufrimiento de Jesús nos muestra https://relaciones-de-pareja66492.shoutmyblog.com/31346332/fascinación-acerca-de-frases-cristianas-de-fortaleza